Lipomatosis encefalo-craneo-cutánea (Encephalocraniocutaneous lipomatosis) - Gen FGFR1 

La lipomatosis encéfalo-craneo-cutánea (ECCL), anteriormente conocida como síndrome de Haberland, es una afección rara que afecta principalmente al cerebro, los ojos y la piel de la cabeza y la cara. La mayoría de los signos y síntomas de esta enfermedad son congénitos y varían ampliamente entre los individuos afectados.

Una característica distintiva de ECCL es el desarrollo de nevus psiloliparus. Algunas personas con ECCL también tienen tumores no cancerosos debajo de la piel en otra parte de la cabeza o la cara. Los individuos con ECCL, también pueden padecer alopecia, hipoplasia o aplasia dérmica y, cambios en la pigmentación de la piel. La anomalía ocular más habitual en las personas con ECCL es un crecimiento no canceroso conocido como coristoma. Estos crecimientos pueden estar presentes en uno o ambos ojos y pueden afectar la visión.

Alrededor de dos tercios de las personas con ECCL tienen tumores grasos no cancerosos en el interior del cerebro o alrededor de la médula espinal conocidos como lipomas intracraneales y lipomas intraespinales, respectivamente. Además, las personas afectadas también tienen un mayor riesgo de desarrollar glioma. Las anomalías del cerebro y de la médula espinal asociadas con ECCL pueden dar lugar a convulsiones, tensiones anormales musculares y discapacidad intelectual; sin embargo, alrededor de un tercio de los individuos afectados tienen una inteligencia normal.

Este proceso es debido a mutaciones en el gen FGFR1 (fibroblast growth factor receptor 1), localizado en el brazo corto del cromosoma 8 (8p11.23), que codifica el receptor del factor de crecimiento fibroblástico 1 (FGFR1). Este receptor interactúa con los factores de crecimiento de fibroblastos (FGFs) para activar la señalización en el interior de las células. La señalización a través de la proteína FGFR1 participa en muchos procesos críticos, tales como la división celular, la regulación del crecimiento celular y la maduración celular. Esta señalización es importante para el desarrollo y el crecimiento normal de varias partes del organismo, incluyendo el cerebro, los huesos craneofaciales así como los huesos de las manos, pies, brazos y piernas.

La señalización a través de la proteína FGFR1 desempeña un papel crítico en la formación, supervivencia y migración de las neuronas en varias áreas del cerebro. En particular, esta señalización parece ser esencial para las neuronas que producen la hormona liberadora de gonadotropina (GnRH). La GnRH controla la producción de varias otras hormonas que dirigen el desarrollo sexual antes del nacimiento y durante la pubertad. Estas hormonas son importantes para la función normal de los ovarios en las mujeres y los testículos en los varones. Además, FGFR1 también parece desempeñar un papel en las neuronas olfativas.

Se han identificado al menos dos mutaciones en el gen FGFR1 en personas con lipomatosis encéfalo-craneo-cutánea (ECCL). Las mutaciones del gen FGFR1 asociadas con ECCL modifican aminoácidos en la proteína FGFR1. Estas mutaciones se describen como "mutaciones de ganancia de función" debido a que sobreactivan el receptor, desencadenando una señalización anormal que altera el crecimiento y la división celular. Se está trabajando para determinar cómo estos cambios en la señalización dan lugar al crecimiento tumoral y las otras características de ECCL.

En algunas personas con ECCL, no se ha identificado ninguna mutación del gen FGFR1. En estos casos, se desconoce el motivo del desarrollo de la enfermedad.

Las mutaciones que causan ECCL no son hereditarias, sino que se producen aleatoriamente en una célula durante las primeras etapas de desarrollo antes del nacimiento. A medida que las células continúan creciendo y dividiéndose, algunas células tendrán la mutación y otras células no, una situación conocida como mosaicismo. 

Pruebas realizadas en IVAMI: en IVAMI realizamos la detección de mutaciones asociadas  con lipomatosis encéfalo-craneo-cutánea (ECCL), mediante la amplificación completa por PCR de los exones del gen FGFR1, y su posterior secuenciación.

 

Muestras recomendadas: sangre extraída con EDTA para separación de leucocitos sanguíneos, o tarjeta impregnada con muestra de sangre desecada (IVAMI puede enviar por correo la tarjeta para depositar la muestra de sangre).